lunes, octubre 22, 2007

Ecología: formas y formas


(o 'el peso de los argumentos')


Escribo este espacio para entregar una versiòn, la mía, acerca del ciertas formas de entregar realidades, noticias, problemáticas y/o ideologías a las personas, particularmente por medios que se han desarrollado para ello.


Entre esas cosas de la vida, me ha llegado una 'cadena', clàsico método de decir poco y mucho a la vez en esta era postmoderna, que me señala:


"necesitan 500 firmas. Si de algo sirven 500 firmas, de algo sirvieron, pero 1º mira el video, porque luego SEGURO QUE FIRMARAS!!. Atención, el
video es EXTREMADAMENTE DRASTICO y CRUDO!!! PINCHA AQUI PARA VER EL VIDEO.
SI TIENES CONCIENCIA APOYA LA CAUSA, DE LO CONTRARIO NO NOS INTERESAS (HAY
QUE SER MUY PATA DE VACA PARA NO HACERLO) .



>Si estas espantado por lo que acabais de ver en el video, escribe tu nombre
>y apellido al final de la lista reenvialo a tus contactos ATENCION No uses
>la funcion 'Remitir correo'. Crea un nuevo mensaje, y usa 'Cortar y Pegar'.
>Cuando la lista tenga 500 personas, por favor enviala a:
PETA2@peta.org "


Y comienza una lista de alrededor de 160 nombres.


Es algo evidente lo que el correo busca...


Esta forma realmente no me gusta, pues me parece algo simplista... El asunto parece ser algo más complejo de lo que normalmente parece, pero puede simplificarse en pocas razones:
1. El lenguaje es burdo y seriamente inductivo (seguro que firmarás, drástico y duro, si no no nos interesas - excluyente);
2. El insulto gratuito del final a quienes no tengan interés en 'comprar' ese punto de vista es poco tolerante (hay que ser muy pate vaca para no serlo...);
3. Lo anterior implica que, por su forma, la peticiòn proviene de un grupo de pensamientos extremistas sobre el particular... creo que la cuestión pasa por un respeto al equilibrio del sistema y de la protección del medioambiente en su conjunto, y no por un repudio al hombre, parte del mismo ciclo, de la misma naturaleza. El tema vendría mejor en ver que, para eliminar el efecto, se debe eliminar la causa, que no constituye la exclusiòn de la actividad humana, sino su reeducación hacia una conciencia ecológica, que permita ver a los hombres cuál es el impacto de sus acciones en la vida de otros seres y en la salud y esperanza de vida de muchos otros.
4. Hay cuestiones mucho más importantes de apoyar a la causa que poner un nombre en una lista de dudosa proveniencia y de dudoso destino: hay instituciones y personas que trabajan con la realidad, aportando día a día, sin empujar, nunca persuadiendo sin convencer.

Y sobretodo en un tema tan importante como el de el problema medioambiental, cuestión que nos afecta a todos desde que el hombre es hombre: la racionalidad histórica se ha encargado de demostrarnos que tenemos una forma particular de actuar en el mundo: el de ser más modificadores del ambiente que ninguna otra especie, y que hemos llegado a acelerar los procesos de manera preocupante.


Como sea, tal vez hay otras formas de invitar a considerar una forma de pensar moderna, más humanista, de considerar al hombre como parte de la naturaleza, conjunto de entes y de un sistema vivo que, de manera cíclica, se renueva costantemente para mantener un equilibrio que perimta la vida de las especies.

Por ejemplo, el considrar que, junto con lo anterior, la protección de la vida, respetada por nosotros, es sin duda un argumento principal para entender al medioambiente como la consideración a los demás hombres.

Lo anterior nos lleva a que esa consideración con el medioambiente - cuidado del entorno, de las especies, del espacio y del intercambio con la naturaleza - implica una conducta Fraterna entre los hombres, por el hecho de respetar el espacio que ocupamos - de otros, de todos - , además de constituir una actitud solidaria, porque busca mantener viva el principal supuesto de toda riqueza y vida: el equilibrio de la vida en el planeta.

Lo anterior además, implica señalar que respetando al medioambiente, uno no busca sólo mantener el estado de cosas de los demás, sino que en el fondo se protege a sí mismo de un mal mayor: provocar cambios no sòlo nocivos por su 'contaminación', sino que también por su velocidad: la celeridad de las transformaciones efectuadas por la sociedad, mediante creterios inmediatistas de 'ganancia máxima' (como importante error no autoregulado por el ente libre llamado mercado, o en decir propio, una conveniente ceguera) conspira contra nuestra propia e individual capacidad de adaptación y futura sobrevivencia...

Este último aspecto (el de la futura sobrevivencia) es fundamental: Esa falta de previsibilidad por los efectos de nuestro propios actos nos llama a considerar el deber moral de ser solidarios socialmente hablando, puesto que debemos adaptar nuestra conducta hoy por nuestra gente, y también por las generaciones futuras. ¿Pensamos hoy en las condiciones de vida que se entregaràn a los que vendrán, hijos nuestro o no?


Por último, si bien es cierto que la mantención de un medioambiente libre de contaminación como parte esencial de la mantención y subsistencia de la vida humana en el planeta debe ser morigerado ante las necesidades económicas patentes del funcionamiento del mundo, ello no significa que deba seguir haciéndose de la forma en que se entiende hoy, en que el mercado y sus actores tienen carta blanca para la explotación y cruel saturación del patrimonio ambiental, sin mirar atrás, y como consecuencia, tampoco hacia adelante.


Es mi humilde opinión.


Creo también que ese será el rumbo de este espacio, de este tiempo, que lo necesita.

Si no queremos que suene a discurso, lo mìnimo que podemos hacer es aplicar a Confucio: si quiero cambiar el mundo, comienzo por mi país; si quiero cambiar el país, empiezo por mi ciudad; si quiero cambiar la ciudad, comienzo por el barrio; si quiero cambiar el barrio, comienzo por la familia... y si quiero cambiar a la familia, mejor comienzo por mí. Son pequeños gestos individuales los que pueden hacer la diferencia. Hoy se necesita la acción conjunta, de manera planificada y responsable. Pero también se puede aportar con el ejemplo.

viernes, junio 01, 2007

¿Meta o método?

(llegar al final v/s el camino que recorremos...)

”La naturaleza nos ha dotado con un incansable deseo de ver la verdad en nuestras mentes”.
(Natura inest in mentibus nostris insatiabilis quaedam cupiditas veri videndi)
Marco Tulio Cicerón



¿Y este tinglado de letras?¿Estos temas de verdad, mentira y otras macanas? ¿Qué tiene que ver con principios? ¿Qué tiene que ver con valores? La respuesta: todo (o nada, en un momento hegeliano). Desde que el hombre ha descubierto al lenguaje como herramienta que asocia y dis – socia; desde que el propio sentido se permea y refugia en la descripción de una idea; o en un convencimiento propio respecto de una determinada idea o planteamiento, sea éste creado, vendido o comprado con otros, por otros y/o para otros… desde que interactuamos o pretendemos interactuar representando o sintiendo o creando esencias o cualidades ideales, es que nos encontramos en un mundo en que sin duda no resulta fácil distinguir un valor de otro… o en que no es fácil distinguir en base a qué doctrina o ideología del vasto y pretencioso universo de ideas se nos invoca a uno y/o a otro. Algo burdo pero necesario es levantar el velo y despegar los ojos para visualizar cómo interactúan los principios y valores que diariamente se plantean en el mundo: cómo la palabra Libertad es una de las más manoseadas del orbe; cómo se invoca a la Tolerancia en los distintos círculos políticos para intentar hacer más débiles a las posturas del contrario; cómo se aduce al Pluralismo para aceptar conductas aberrantes de censura y de control; cómo se exagera lo Fraterno para obtener, y cómo se miente con la Igualdad malentendida, pretendiendo mantener un estado de cosas difícilmente superable por pocos… esta reflexión puedo (y pretendo ) ilustrarla con una sensible paradoja humana: la de la meta y el método.
Hay esencias y valores hacia los cuales todos aspiramos, o hacia los cuales la sociedad se dice aspirar a alcanzar: belleza, valentía, pluralismo, solidaridad… y ante ellos, ante su inevitable relucir y su importancia, muchas de las formas complejas de ser en la sociedad se configuran para alcanzar estos valores, sea en forma o en fondo (de manera real o aparente). Pues bien, a modo de ejemplo, tenemos a quienes quieren alcanzar la paz en medio de un conflicto. Entonces, viene un Ghandhi u otra persona a provocar la resistencia pacífica, en que media India se ha sentado a hacer nada. Una acción, creación humana, que aspiró a realizar la paz. Otro ejemplo: unas personas, para alcanzar de manea más pura cumplir las “leyes de dios”, se aislan en una comunidad cerrada para vivir en comunión y austeridad solos, frente a frente ellos y la creación. Con ello aspiran a realizar el valor de la fe (en el vaso, en El).

El problema surge cuando en la sociedad nacen formas, sistemas y modos de ser para aspirar a realizar importantes valores (de los más altos, de existir una escala), y el sistema o modo de pensar o forma para aspirar a un determinado valor se degenera, se disfraza, se mal utiliza. En el ejemplo puesto será el hecho de crear un ejército para aspirar a la paz, o el de anunciar al mundo la existencia de armas de destrucción masiva en X o Y lugar para provocar un choque de civilizaciones… Es entonces como somos capaces de transgredir realidades, de imponer ficciones, de destruir y crear un propio lenguaje para alcanzar – o creer alcanzar – una determinada idea o valor… en resumen, se abandonan las reglas del juego.

¿Meta o método?

Es de esta forma cómo van surgiendo deformaciones producto de la ‘creatividad humana’ (sí, para eso tenemos harta creatividad), a tal punto de que estructuras de organización de la sociedad como el gobierno y la política terminan siendo prostituidas, vulneradas en su esencia… a lo largo de la historia se han cometido las más grandes atrocidades de que el hombre tiene memoria y reacción, en nombre de importantes valores como la Verdad, la Justicia, y –la regalona de la comadrona - , la Libertad. Si no, preguntémosle a la historia y a la Iglesia Católica, Judía o Musulmana, a los regímenes Bolcheviques, Fascistas o Nazis, o a Bush Junior…

¿Meta o Método?

¿Les parece que se ha dado preeminencia al método? Es imposible para el hombre de hoy: darle preeminencia al método significa renunciar al interés, significa someterse a ser el último gil de la cadena alimenticia, significa abandonar el éxito… significa hacer más lejana la meta…
¿Qué importa el valor? ¿Qué importa la libertad del trabajador si no va a trabajar el domingo para cumplir la meta? ¿Qué importa la tolerancia si no me quieren dar un sillón en el Congreso? ¿Qué importa la solidaridad, si el vecino no da ni uno a la colecta?

Hoy tenemos dos puntos extremos, ambos en un devenir.

Ideológicamente está claro cómo el hombre puede fácilmente corromper las ideas, debilitar las esencias, provocar malestares y frustración en otros producto de una expectativa intensa e inevitable: en sociedad nos creamos la existencia de la idea de verdad, de la idea de justicia, de la idea de libertad, de la igualdad… y nos internamos en la búsqueda de estas naves hundidas para sacarlas a flote y mostrarlas en el serio juego de la conciencia: el saber y conocer realmente que ellas existen, y que nos sirven para tener una real comprensión del mundo, esto es, verificar lo que se nos presenta como único y necesario: el mundo, sus entes, sus personas, sus problemas y finalmente, sus soluciones. Porque muchos somos seres que, al final del día, buscamos una verdad, tal vez no absoluta, pero sí estable, entendible, aún sabiendo que ante la realidad del todo cambia, cambiará: ella terminará por mutar en su esencia, o yo en mi perspectiva.

Anaxágoras, Griego, alguna vez dijo "A causa de la debilidad de nuestros sentidos no somos capaces de juzgar la verdad". Creo yo que no podemos limitarla a la idea de 'percepción' (véase a Maturana), pero sí que habrá que aceptar que la verdad no será un fin en sí misma, aunque nos pese... y que, lo que pretendemos que sea la verdad no será sino la suma de todo lo aprendido, conocido y vivido a lo largo del propio camino...
camino en el que el despertar será fundamental para alcanzar un verdadero crecer.

”la verdad raramente es pura, y nunca simple”
Oscar Wilde

sábado, diciembre 23, 2006

La mentira


Anteriormente me preguntaba ¿qué es la verdad?

Referente al tema, Frederich Nietzsche señaló:
«¿Qué es entonces la verdad? Una hueste en movimiento de metáforas, metonimias, antropomorfismos, en resumidas cuentas, una suma de relaciones humanas que han sido realzadas, extrapoladas y adornadas poética y retóricamente y que después de un prolongado uso, un pueblo considera firmes, canónicas y vinculantes. Las verdades son ilusiones de las que se ha olvidado que lo son; metáforas que se han vuelto gastadas y sin fuerza sensible, monedas que han perdido su troquelado y no son ahora ya consideradas como monedas, sino como metal.»

(Vaihinger, La voluntad de ilusión en Nietzsche, en: «Teorema», 1980. )

Ahora viene lo bueno: ¿Qué es la mentira? Por ahí señalan que una mentira es una declaración realizada por alguien que cree o sospecha que es falsa, esperando que los oyentes le crean. Así, una cierta oración puede ser una mentira si el interlocutor piensa que es falsa. Las ficciones, aunque falsas, no son mentiras (qué diría don J.L. Borges si leyera esto). Dependiendo de la definición, una mentira puede ser una falsedad genuina o una verdad selectiva, una mentira por omisión, o incluso la verdad si la intención es engañar o causar una acción en contra de los intereses del oyente. Mentir es la acción de 'decir una mentira'. Consecuentemente, a las personas que dicen una mentira (especialmente a quienes las dicen frecuentemente), se les llama "mentirosos". Mentir implicaría, por tanto, un engaño intencionado.

Como puede resaltar en sus mentes, a prima facie, el atrevimiento de definirlo así no me es satisfactorio.


La mentira está presente en varias paradojas, la más conocida es la paradoja del mentiroso, comúnmente expresada como "En este sentido es mentira," o "En este sentido es falso." Esta paradoja muestra que es posible construir oraciones perfectamente correctas según las reglas gramaticales y semánticas
pero que pueden no tener un valor de verdad según la lógica tradicional.

Consideremos una de las formas más simples de esta paradoja: “Esta oración es falsa”:
- Si suponemos que esa afirmación es verdadera, entonces lo que dice es verdadero. Ya que la oración afirma que es falsa, entonces debe ser falsa. Por tanto, si suponemos que es verdadera, alcanzamos una contradicción.
- Si suponemos que la oración es falsa, entonces lo que afirma debe ser falso. Ya que afirma que la oración es falsa, entonces la oración debe ser verdadera. De nuevo, si suponemos que es falsa, alcanzamos una contradicción.

La versión más antigua de la paradoja del mentiroso se atribuye al filósofo grigo Eubulides de Mileto, que vivió en el s. IV a. de c.
Supuestamente Eubulides dijo:
Un hombre afirma que está mintiendo. ¿Lo que dice es verdadero o falso?
Es posible construir esta paradoja de modo que una afirmación no se refiera directamente a su propio valor de verdad. Existen de este modo varias versiones equivalentes:
La más simple: “La oración posterior es cierta” y “La oración anterior es falsa”.
Una tarjeta, en una de cuyas caras aparece: “Lo que está escrito en la otra cara es cierto” y en la otra: “Lo que está escrito en la otra cara es falso”.
Un libro, que en la página 23 tiene escrito “Lo que está escrito en la página 24 es cierto” y en la página 24: “Lo que está escrito en la página 23 es falso”.

Incluso existe una llamada paradoja de la mentira, pero que sólo tiene la apariencia de ella, mas no es tal. Se trata de la 'Paradoja de Epiménides'. El era un legendario poeta filósofo del s. V a. de c.
Se atribuye a Epiménides haber afirmado:
Todos los cretenses son unos mentirosos.
Sabiendo que él mismo era cretense
¿decía Epiménides la verdad?
A ver: Antes de empezar, hay que aclarar que definimos que un mentiroso sólo hace afirmaciones que son falsas. Esta definición es común en el estudio de la lógica, y es posible obtener esta paradoja con menos ambigüedad (aunque también demasiada complejidad) si se formula como Todos los cretenses son personas cuyas afirmaciones son siempre falsas.
Siguiendo esta definición, a primera vista parece que la afirmación se autocontradice, ya que Epiménides está afirmando que miente
. Esto no es realmente cierto, ya que a pesar de que la afirmación no puede ser cierta, sí podría ser falsa. Si suponemos que es cierta, Epiménides sí está afirmando que, como cualquier cretense, está mintiendo, y por lo tanto la afirmación sería falsa, y alcanzaría una autocontradicción. Pero si suponemos que es falsa, no alcanzamos una contradicción, ya que si la afirmación Todos los cretenses mienten es falsa, significa que hay al menos un cretense, no necesariamente Epiménides, que dice la verdad. Por lo tanto, es perfectamente posible que la afirmación sea falsa, y la afirmación no es una verdadera paradoja.

¿Y? ¿Por qué perder el sueño? Resulta que, producto de nuestra configuración social (humanista, hipócrita, decida cual) hay quienes señalan lo siguiente: "la mentira es en su esencia inconmensurable y por lo tanto no tiene tamaño ni puede ser medible, a pesar de que sus efectos conlleven daños o consecuencias leves o muy graves..." Para qué mencionar los esquemas diseñados por conocidos autores religiosos... Incluso, hay autores que las clasifican: "La mentira racional persigue un interés concreto, es malévola y se emite con al intención de perjudicar o engañar. En la mentira emocional, lo que se dice o hace no concuerda con la situación emocional de la persona. Y en la mentira conductual hacemos creer que somos lo que no somos: más jóvenes, mejor informados, menos anticuados... Pero hay también otras clases de mentiras: chismes, rumores y las mentiras piadosas..." Las clasifican, reconociendo que "hay mentiras de mayor fuerza, o de mayor malintención que otras...".

Debo concluir señalando lo siguiente: Ustedes son los que deciden cómo juzgan al mundo en que viven, y cómo consideran a otra persona, si incluyen sus defectos o si pretenden vivr con sólo la porción favorable de ellas... Mas, hay una afirmación - no explicación - que no puedo dejar de hacer: todo el mundo miente. Ello, por muy aboslutista que suene, lo señalo como una característica natural de la condición humana: sea por blanco o por negro, por anga o por manga, como sea, alguien en el orbe lo hace. La cuestión es que, para distinguir lo uno de lo otro, es que nacemos con algo llamado cerebro, el que, bien alimentado y ejercitado, funciona. ¿Podemos distinguirlas? Si es así ¿Las rechazamos de plano, o negamos años de autoaprendizaje por vía de la observación o experiencia? ¿Relativizamos todo o sopesamos lo que tenemos al frente, intuitiva y/o analíticamente?

Para terminar: En una serie española llamda "voces contra la globalización", el mismísimo José Saramago señaló que nuestra época será conocida como la Edad de la Mentira. Poniendo como ejemplo un clásico que no pasará de moda: la construcción infundada de Estados Unidos sobre la falsa existencia de armas químicas para invadir Irak. El mundo gira a su alrededor y nosotros con ella. Una mentira que, no por ser manifiesta, deja de acarrear consecuencias tan graves como vemos día a día. Pero no es la única.

Lo característico de mentir - bueno, malo, neutro, no creo saberlo aún - es que acaba siendo un hábito difícil de frenar.

martes, diciembre 12, 2006

Nacimientos . . .

(Madonna 1894-95; óleo, 91 x 70.5 cm; National Gallery, Oslo )

Así, como Edward Münch (1853 - 1944), quién ha inspirado la imagen que hoy cubre esta pantalla, hay muchas otras cosas han nacido un 12 de diciembre...
..cuántas cosas pueden nacer o morir en un día... citando a un veterano de la chispa de la vida,
"todo es para mejor, pues con todo aprendemos, con lo bueno, con lo malo, con lo feo..."
Aunque no me familiarizo - o intento no hacerlo - con esos términos, prefiero señalar que algo muy importante ha sido que "trunfar" (´tan amplio como suena'), es aprender a fracasar, y que hacerse poderoso implica aprender el alterum non laedere...


Hoy soy, busco seguir entendiendo, y respiro agradecido del aprendizaje. Aunque mi razón no cesará de soñar con un plano del laberinto, ni de buscar las sombras al mediodía.


sábado, diciembre 02, 2006

De Aletheia, Veritas, y la pregunta ab eterno...


La Verdad... ¿es?
La Verdad es una ilusión,
La Verdad es el puro Fluir...
La verdad existe sólo porque nosotros existimos.
La Verdad es sencillamente inasible,
la Verdad está en todas partes.
La verdad no busca a nadie,
mas suele molestar de repente...
Lo que entendemos por Verdad se constituye por el conjunto de hechos
que son la consecuencia de la suma de todas las mentiras del mundo.
En Verdad, aquello es mentira.
La Verdad es sólo lo personalmente válido en la propia conciencia como
elemento (subjetivo, normativo, de cultura), capaz de dar parte de una solución
a un problema, o de satisfacer (responder) a una necesidad.
La Verdad es una, como uno.
La Verdad es, como alguien señaló una vez, una esfera,
cuyo centro se encuentra en todas partes
y cuya circunferencia en ninguna.
La Verdad es sólo una pregunta,
que siempre va acompañada por una respuesta ambigua,
insatisfactoria, a medias;
La Verdad es un Medio;
la Verdad es un Fin;
la Verdad es que no importa,
la Verdad es que muero por Verdad.
La Verdad es la Jaula
a la que estamos condenados como meros intérpretes de la vida.
La Verdad es como el agua que emana del dulce manatial del Todo;
la Verdad en todos, y todo es en Verdad.
Veritas est adecuatio intelecto et rei.
La Verdad es para algunos pocos, como casi todo en la vida...
La Verdad es una falsa necesidad
derivada del nulo entendimiento de la propia existencia en diferentes planos...
La Verdad es el propio inconsciente, que al final, siempre gana.
La Verdad, sólo cuando conviene.
La Verdad suele ser como el último cambio de jugador en el último minuto de juego;
la Verdad, al igual que la muerte, sólo llega en algún momento, y esa llegada no puede evitarse;
menos puede evitarse esa íntima sensación y reflexión de entender ese momento.
La Verdad es que puedes hacerte el (la) huevón (a).
La Verdad depende de la época: se viste de monje,
o de papa, o de político, o de obrero,
y de vez en cuando, lo hace de uniforme...
La Verdad puedes escribirla como plazcas, pero será sólo hasta que reviente.
La Verdad es que no debo buscarte.

La Verdad es que lo más seguro es que no te guste lo que vas a encontrar.
La Verdad es 'el de arriba'.
La Verdad que el Amor existe;
la Verdad no es la palabra, ni la causa, ni el destino:
si será el efecto de todos ellos.
La Verdad es que nada importa,
la Verdad es que siempre importa.
La Verdad es como la estrella
que guía al navegante en su camino,
pero que éste jamás alcanza....
La Verdad es la convicción de la indiscutida mayoría.
La Verdad es el arduo trabajo del poder de la Mente.
La Verdad es la estatua pulida y esculpida,
producto de muchas horas de trabajo, paciencia,
y suerte por la elección de la piedra correcta, la técnica correcta,
y suerte de tener la vida para lograrla.
La Verdad suele ser un equilibrio entre el error y el acierto;
la verdad es que no hay buenos o malos: sólo hay.
La Verdad es que la escribo y no es.
La Verdad es un tema agradable para debatir...
...salvo en época de elecciones.
La Verdad ¿la tinenes por ahí?
La Verdad es que los ojos no mienten
[ el truco estriba en que 'no mienten', pero tampoco 'dicen verdad' ].
La Verdad es que ya te aburriste de leer esto.
La Verdad depende de cada uno,
la Verdad depende de tí.

miércoles, noviembre 08, 2006

recuerdos y cosas pendientes...

He aquí la letra de una canción...

Jealous Guy (del tío Lennon):

I was dreaming of the past
And my heart was beating fast
I began to lose control
I began to lose control
I didn't mean to hurt you
I'm sorry that I made you cry
Oh no, I didn't want to hurt you
I'm just a jealous guy...

I was feeling insecure
You might not love me anymore
I was shivering inside
I was shivering inside
I didn't mean to hurt you
I'm sorry that I made you cry
Oh no, I didn't want to hurt you
I'm just a jealous guy...
I didn't mean to hurt you
I'm sorry that I made you cry
Oh no, I didn't want to hurt you
I'm just a jealous guy...

I was trying to catch your eyes
Thought that you was trying to hide
I was swallowing my pain
I was swallowing my pain

I didn't mean to hurt you
I'm sorry that I made you cry
Oh no, I didn't want to hurt you
I'm just a jealous guy,
watch outI'm just a jealous guy,
look out babeI'm just a jealous guy.

No sé por qué me acuerdo de ciertas cosas, como lo que faltó decir en su momento... a veces ya es tarde.
Espero algún día saber que sabe...

jueves, octubre 05, 2006

"Libre examen - reloaded"

Afirma científico alemán que el ser humano carece de libre albedrío...

El director del instituto alemán Max Planck para la investigación cerebral, Dr. Wolf Singer, afirmó que desde el punto de vista neurobiológico, el ser humano carece de libre albedrío, ya que el cerebro es el encargado de tomar las decisiones.El ser humano se diferencia de los animales por su capacidad de decidir, sin embargo, para los científicos que se encargan del estudio de los procesos cerebrales, la idea del "hombre libre" es cada vez más difusa.Singer destacó que aquello que el ser humano experimenta como una decisión, no es otra cosa que la justificación posterior de cambios de estado que de cualquier forma sucederían, porque la información para tomar decisiones se basa en la experiencia propia.
El neurólogo alemán dijo que los últimos resultados del estudio del cerebro no son tan deprimentes porque "lo que voy a hacer de ahora en adelante es la consecuencia de eso que soy yo".Para el científico alemán, el cerebro no toma decisiones de manera arbitraria, sino que éstas se basan en experiencias acumuladas.El especialista en neurología subrayó que el cerebro cuenta por completo con la iniciativa, y que no sólo reacciona como una máquina a los estìmulos del exterior.Recordó que anteriormente los científicos creían que en algún lugar del cerebro se hallaba la conciencia, y que en ella se concentraba toda la información y se comparaba para tomar decisiones."Actualmente está comprobado que no existe tal centro porque el cerebro trabaja de manera descentralizada", sostuvo."Desde el punto de vista de las ciencias naturales todavía no es comprensible de ninguna manera cómo puede crearse la conciencia a partir de la unión de átomos. A pesar de eso, todos sabemos que existe", enfatizó.
El neurólogo señaló que el ser humano tiene que aprender a vivir con esta contradicción y a acostumbrarnos a que existen dos modelos descriptivos que se contraponen: por un lado las situaciones subjetivas y por otro los hallazgos de las ciencias naturales. El científico alemán resaltó que "nosotros somos los últimos que se enteran de lo que nuestro cerebro tiene la intención de hacer", y agregó que existen ya varios experimentos que lo confirman.Uno de esos experimentos es el que el investigador estadounidense Dr. Benjamin Libet llevó a cabo para medir la distancia temporal entre la acción y la decisión voluntaria.Según el investigador, el sentimiento de que se realizó un movimiento con intención se produce exactamente 350 milésimas de segundo después del movimiento.
El filósofo francés René Descartes (1596-1650) escribió que el libre albedrío le permite al ser humano aceptar esta idea y rechazar aquella, y con ello describió la idea aún válida de que el hombre se conforma de dos sustancias muy diferentes: el cuerpo y el espíritu.Descartes creía que las dos sustancias tendrían que estar unidas de una manera, pero según el filósofo, el espíritu puede concebir una determinación que el cuerpo tiene que llevar a cabo, o también algo que el cuerpo ve, provoca que el espíritu reflexione.Sin embargo, Descartes nunca se pudo explicar cómo funcionaba esta unión, y lo que creyó más probable fue que el "puente" se localizaba en algun lugar del cerebro.El Dr. Wolf Singer señaló que si la sociedad descarta el concepto del libre albedrío se tendrá que reflexionar sobre el trato que se les dará a los comportamientos erróneos, a la culpa y al castigo."Por supuesto no todos los actos criminales se pueden disculpar bajo el argumento de que el culpable 'no pudo hacer nada para evitarlo', no obstante, es necesario tomar en cuenta un nuevo punto de vista", agregó el cientìfico alemán.
Puse un aporte de un amigo (Grande Alexis) para plantear la reflexión en torno al tema del Libre Examen, el Determinismo y la Codificación...

Ahora mi pregunta: ¿Y qué Opinas Tú?

viernes, septiembre 08, 2006

Las palabras de una barwoman del Licor...

Les presento a una Barwoman, una mujer que sabe servir su propio licor... se hace llamar Alicia... escribe de la forma que pasaran a descubrir, te envuelve y te cubre con su fuerza, y te produce una adiccion, adiccion por esa fuerza dada por la espontaneidad y la sutileza con que esparce el licor por el vaso... sirve el trago con un agradable toque.

"[..alicia es siempre tan breve
que ya ha terminado
alicia dice que te quiere
cuando ya te ha abandonado...]

y manejamos tiempos...
sonidos...
sueños...
palabras...
actitudes...
ilusiones...

y manejamos desiertos
de flores...
de estanques...
de mentiras...
de verdades...

y manejamos movimientos
que nos permiten acercarnos
sin tocarnos
que nos permiten delirios
sin locuras
que nos permiten recuerdos
sin historias...

y busco en mi maletin
razones para proseguir
y busco en mi porvenir
razones para proseguir
y busco en mi actitud
razones para no infringir...
esas historias
que sin ser presentes, sin ser futuro
consituyen parte de mi pasado...
de mi pasado...

entonces...
he de ser escueta
he de ser precisa
para no caer en juegos eternos
ni mentiras enredosas...

las cuentas claras mantienen la amistad no?

alicia...es siempre tan breve..."

... ella misma lo dijo...

Salud!

viernes, agosto 18, 2006

Lo "responsables" que somos. (desconcierto social)





Introducción.
“Duele en la conciencia la incapacidad de la civilización contemporánea para hacer omnilateral el progreso de la humanidad de nuestros días, y para hacer paralelos y correspondientes su desarrollo psíquico y su desarrollo físico – material.”
Eugenio M. De Hostos.
La evolución humana nos sorprende día a día. Más y mejor acceso a la salud, mejor acceso a la educación, mayor cantidad de medios de comunicación, mayor rapidez en las comunicaciones, eficiencia en la producción masiva de bienes y servicios, en fin, diversas soluciones que permiten a muchos afirmar categóricamente que “hemos llegado como humanidad a un amplio desarrollo científico y cultural”. Aseveración, al parecer, innegable. El hombre, ya adulto de razón, ha llevado su genialidad a grandes alturas en este ámbito. Y es natural que nos sorprenda, pues es nuestra propia evolución como especie.
Sin embargo, para los que no se han dado cuenta aún, algo falta en la enumeración que hace a tantos hombres inflar orgullosos sus pulmones de aire y CO2: No se ha dicho si hemos progresado respecto de la evolución moral humana, o si así lo consideramos siquiera; o si hemos logrado algún desarrollo moral acerca de nuestra conciencia social, de manera acorde con el innegable desarrollo material ya mencionado.
Y esa omisión a muchos – me atrevo a decir, a la gran mayoría – no nos sorprende. No nos sorprende que las relaciones humanas se impersonalicen tanto en lo meramente productivo como en lo afectivo; tampoco nos sorprende vernos sumidos en una excesiva individualidad, en que lo cotidiano se transforma en la funcionalidad del día a día; muchos no nos preocupamos de una realidad común, sino que única y exclusivamente de la propia realidad, relegando al olvido al hermano que observa y que – coincidencia – también forman parte de este mundo; dejando de lado al hermano que intenta vivir ese día a día en busca de lo cotidiano: ese círculo vicioso de la satisfacción de lo inmediato.
¿Cuál es el punto? Que es increíble el grado de involución – o extraña evolución – de lo que es nuestra conciencia social, y, principalmente, de lo que es nuestro actuar en la vida profana toda vez que uno, como ser consciente del mundo y su acontecer, estudioso de éste y crítico de su contingencia, no se atreve a realizar un aporte a esta realidad, que muchas veces no gusta y en que se prevé que no es el mejor proyecto de futuro.
El problema: responsabilidad.
“El hombre ya es adulto de razón, y hasta se le puede considerar adulto de conciencia...”
Por ahí algún pensador escribió la reciente frase. Si consideramos lo anterior, sabemos que considerarlo “adulto de conciencia” es sólo hasta cierto punto: hasta el punto de reconocer que el desarrollo de la razón humana y de una perspectiva materialista de la vida. Ello tal vez por muchos factores, los que, con idea de dejarlos para la libre discusión, no analizaré acá. Sí me centraré en uno de ellos, el que a mi juicio merece cierto grado de consideración hoy. Me refiero a la responsabilidad. Particularmente a la responsabilidad social1.
La responsabilidad social es la capacidad de todo sujeto de conocer y aceptar las consecuencias que un hecho suyo realizado libremente tiene en el conjunto de personas que conforman la sociedad que lo rodea. Considerando este concepto, podríamos llegar a la conclusión de que todas las personas tienen esta capacidad. Mas ocurre que lo que tenemos casi todas las personas se acerca más a la idea de responsabilidad que a la de responsabilidad social. En efecto, en esta diferencia que, en vista del análisis puede parecer semántica, radica el principal problema: El hombre común entiende cuáles son las consecuencias de su actuar para sí mismo, pero ese mismo hombre no entiende o no quiere entender las repercusiones de sus actos en la sociedad.
Y en ese “no entiende o no quiere entender”, el conocimiento juega un papel fundamental.

Responsabilidad Social y Conocimiento.
En la responsabilidad social toma importancia el concepto de conocimiento: como noción de las cosas que nos rodean, como la aprehensión material de un objeto y como facultad del hombre de relacionarse con el mundo exterior. Estas tres formas de saber qué es conocimiento están referidos al hecho de entender, por el ejercicio de la mente, las cualidades y naturaleza del mundo. La relación fundamental entre estos dos conceptos – Responsabilidad social y Conocimiento - es que el hombre, sea por ignorancia, sea por deliberado y conveniente olvido, no actúa conforme a un sentido de la Solidaridad Social, ni de la sana convivencia, ni en vistas a lograr una mejor calidad de vida más allá de su metro cuadrado; para qué hablar de la perpetuidad de la especie...
Esta falta de conocimiento en el pensar y actuar del hombre se da, a mi parecer, con dos situaciones distintas:
En primer lugar, el del ignorante, el que no sabe, no conoce bien el entorno, ni tiene los medios para hacerlo. Es en este caso que el principal camino para desarrollar la capacidad de conocer del hombre es la Educación, cuestión que nunca estará de más mencionar, y en que su evolución dependerá de las acciones y políticas que lleven a cabo las personas en una determinada localidad. Es por esto que se le puede perdonar al ignorante, considerando el nivel de su ignorancia, que muchas veces no tenga esa capacidad de involucrarse con su entorno.
En segundo lugar, tenemos para un análisis al “hombre que no quiere entender”, al que, para efectos de este tema en cuestión, llamaremos “Inconsciente”. Este hombre inconsciente es el que termina bloqueando todo ese “peso del conocimiento” que, al decir de Nietsche, lo aplasta contra el suelo y debe abandonarlo para poder sobrevivir. En este caso, la ignorancia es deliberada por el hecho de no poder llevar “la carga de la responsabilidad”, o sea, lo difícil de vivir en sociedad. “Para qué considerar a los demás si conmigo me basta, para qué ayudar al hermano si nadie más lo va a hacer, para qué intentar hacer un momento más grato de la vida a alguien que no conozco sui el mundo es tan grande y yo tan pequeño...” Estos son algunos de los razonamientos más blancos que pasan por la mente de un “Inconsciente”. Por ello, tienen el más instintivo sentido de la perpetuidad (esto es traer hijos al mundo) y un marcado individualismo. Al parecer ¿Tendría remedio una persona con esa concepción del mundo y de la vida?
Conclusiones.
“...se advierte que la moral no es una performance suplementaria y lujosa que el hombre añade a su ser para obtener un premio, sino que es el ser mismo del hombre cuando está en su propio quicio y vital eficiencia. Un hombre desmoralizado es simplemente un hombree que no está en posesión de sí mismo, que está fuera de su radical autenticidad y por ello no vive su vida y por ello no crea, ni fecunda, ni hincha su destino”.
Ortega y Gasset.
Creo – o quiero creer – que el Hombre Inconsciente sí tiene remedio, el que estaría dado por el convencimiento a través de un remezón en su lógica de pensamiento, de un cambio de su razonamiento cortoplacista e inmoral, en las palabras de Ortega y Gasset.
Como personas que vivimos en este desconcierto social, el ideal es que entendamos que cada hecho en que participamos y cada acto que realizamos repercutirá en los de otros y en quienes vendrán. Teniendo claro esta cuestión, podremos actuar con convicción y realizar, en distinta medida, el valor de la solidaridad social.
Considerando lo anterior, podemos deshacernos tranquilamente en “mea culpas varios”, desgarraduras de vestidos, etc. acerca de la poca efectividad de nuestra responsabilidad social en el mundo profano de hoy. Pero recordemos que existe consenso en un modelo de persona, el hombre íntegro (en mi humilde opinión, humanista y laico) llamado a realizar nuestros principios de la mejor forma en el mundo profano. Y es considerando esto que, según yo y en base a lo expuesto, es que tenemos un compromiso moral ineludible con nuestra realidad, en relación a la que pueda tener el hombre "medio". Ello por nuestra diferente condición como hombres conscientes, sin creernos superiores, en nuestro propio quicio y eficiencia, con altura de miras; algo más cultos y observadores del mundo, poseedores del conocimiento que nos hace responsables socialmente. Y es por ello que tenemos un compromiso ineludible con nuestro entorno, un compromiso que puede ir desde el simple ejemplo por acto propio hasta la actividad conjunta de los hombres en vista al ideal común de ser solidarios. Y, quién sabe, comenzar a caminar hoy, en el umbral del milenio para conminarnos, ojalá con una sonrisa, a que actuemos de modo que los mil años venideros cierren con una bocanada de aire puro que haga volver al hombre a su racionalidad y emocionalidad en equilibrado crecimiento: a una perfectible belleza y autenticidad.

Gamalier
Concepción, viernes 18 de agosto de 2006.

viernes, julio 21, 2006

(...)





Una frase que me gusta muchísimo, que resume cuánto he avanzado en mi vida, dice :"es libre quien sabe y conoce"... y creo que hoy, después de tanto tiempo de 'saber' sin conocer, después de haberme encontrado con el peso de la conciencia, y habiéndolo levantado, he logrado dimensionar muchas de las cosas de mi vida, y de las de otros, otros acerca de los cuales nunca imaginé el alterar... hoy dimensiono, y me convenzo de que no puedo seguir quedándome en el sólo saber, pues hay que decidir, decidir y equivocarse, equivocarse y levantarse, sólo así se aprende realmente... sólo así yo aprendo a ser libre, sólo así realmente "conozco" de lo causado y de lo aleatorio, de la sabiduría, de la técnica, de nuestro impulso creativo, del lenguaje, de lo difícil que puede resultar el convivir, de lo fácil que puede resultar el convivir, de lo increible que resulta crear, de lo simple que es tomar el camino y hacerse cargo, de lo simple que resulta equivocarse...

Hoy, después de cuánto he visto y oído, estoy (
sé que lo estoy)
listo.

Abran las puertas...
(como diría el tío Nicanor: "a Chillán los boletos,
a recorrer los lugares sagrados...")

Voy con todo... los alcanzo, alcáncenme...

Concepción, viernes 21 de julio de 2006.

domingo, junio 25, 2006

Camino...


Camino pensando en la gracia que tienen tantos de no levantarse tan temprano, camino: mientras veo la hora y mordisqueo mi pedazo de hallulla que alcancé a sacar de la mesa, engullo mientras busco mis monedas y mi pedazo de plástico rojo para abordar la micro; llego al paradero, quito las lagañas que todavía pegan mis ojos, y miro hacia el frente el vacío, que se llena de luces ante el silencio cómplice de una mañana aún oscura ... hasta que veo a ese pequeño monstruo de lata que se acerca, ya satisfecho por su exitosa caza matutina, lo que me juega inevitablemente en contra: mientras levanto ilusamente mi pulgar, veo despacio cómo se acerca, pasa por mi lado, impávido, mientras la mano traicionera baja el plugar y va levantando el dedo medio con furia y ganas, heroico y enérgico ante la desazón de quedarse abajo... qué importa, si ya vendrá la próxima, ojalá no venga tan llena, pienso algo más calmado, maldiciendo a cuánto santo conozco por vivir tan lejos, mentando a la madre de cada chofer por no poder llegar a pata... sigo viendo al frente... ¿qué micro es esa? ..nmo, no me sirve, carajo, micro conchesumadre, no pasa nunca la hueá de micro, chucheteo, no importa lo poco académico... miro hacia el fondo, detrás de los cerros, a ver el sol que comienza a salir detrás de la cordillera... mierda, significa que ya estoy atrasado... y el paradero empieza a llenarse de gente, pendejos de colegio pasados a leche, las típicas viejas de consultorio y uno que otro trabajador... aver, ahí viene una... ojalá el chofer no huevee... tome... gracias... uff, qué buena.... voy mirando como hueón pa afuera, ¿por qué no me dedico a abrir el libro y ponerme al tanto pa que el viejo no me pille con alguna pregunta, en vez de andar mirando? no hay caso, siempre prefiero mirar afuera, las calles, los enigmas, las personas que se mueven como hormigas, esclavas del camino... aquí me bajo, creo que es mejor seguir caminando... despierta, que el día recién empieza, no puedes demorarte tanto, que esta ciudad no te la puede ganar, la U no te la puede ganar, que sólo quiero hacer las cosas bien, como cada uno de mis amigos, en cada disciplina, cada uno por su lado.... ¿en qué estarán estos? ¿cómo estarán? ¿eestarán como yo? ¿se sentirán a gusto con lo que hacen? ¿les rendirá como a mí, en este laberinto de cemento, fieros, libros, cajas, trago, distracciones, traiciones, competencias, incompetencia, fuerza, no somos débiles, queremos cosas distintas, pero llegaremos igual, no importa, si todos le ponen el hombro, yo también lo voy a hacer, , hasta que las velas no ardan, como en los viejos tiempos, putas que los echo de menos, amigos, hermanos de la vida, familia... ¿y en mi casa? ya mis viejos también esperan mucho, puta que los quiero y los echo de menos, a todos, miro hacia arriba y descubro que las ganas también se pierden, se pierde lo fácil, puchas que era fácil antes cuando me quedaba a huevear hasta tarde y ni estudiaba, ahora sólo quiero que todo valga la pena, nadie dijo que iba a ser fácil, sólo quiero terminar y llegar a casa tranquilo, sin este maldito apuro, sin ser rodeado por este ligar extraño a mis ojos todos los días, sin ayuda y sin compañía... ya, cálmate que vas llegando, no muestres debilidad a nadie, no te conviertas de cazador a presa, sonríe y piensa que todos pasamos por lo mismo, y que, total, soy uno más, de tantos, si otros pudieron ¿por qué yo no?... habrá que seguir, orgullosos, eso es mierda, abre la puerta de la sala, respira hondo y siente que estás en casa, sonríe, saluda, firme, sigue así:
de frente, eso es, hacia adelante... hasta morir...

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Qué quieren que les diga: me acordé de mis compadres, mis grandes amigos con los que pasé grandes experiencias y que hoy están afuera de sus casa, en Santiago estudiando muchos de ellos, alcanzando sus metas... Pueblo, les digo, que no sé si es difícil - no tomé la decisión de ir tan lejos, pudiendo hacerlo - pero lo imagino, y les digo: fuerza. Para ustedes, Flaco, Flavia, Pelao 'Tinker', Jaime, Ricardo (aunque uno que otro ya 'viva' allá), para ustedes es la vibra para salir adelante y encontrarnos nuevamente, más pulidos que antes, más carreteados por la vida, pero más vitales, mejores que ayer... les deseo lo mejor siempre.
Concepción, domingo 25 de junio de 2006.

lunes, junio 19, 2006

HAS BEEN A LONG TIME...



Hola a Todos...

Espero que estén muy bien en sus respectivos quehaceres. Por mi parte, debo disculpar la tardanza de la actualización de este espacio, ya que me he dejado estar´durante el último tiempo....

Una pregunta: ¿Nunca les ha pasado por la mente esa sensación de que pierden su capacidad creativa?
¿Esa esensación de que parece que todo se ha reducido a "
concepto, características, naturaleza, requisitos, ..."? pues, qué quieren que les diga: esa sensación se hace cada vez más patente en mí, pareciera que, al contrario de lo que debiera pensarse, la lectura jurídica me retiene y me encierra las palabras, me quita vocabulario.


Comienza a secarme, dejándome, poco a poco, sin palabras.

Pareciera ser uana cuestión ilusoria: manejo una barbaridad de vacabulario que no se imaginan... pero es vocabulario técnico: no podría decir, por ejemplo, "me voy a tramitar a ese cuerpo cierto 'a cuaderno separado'..." es como poco entendible si no estudian Derecho, no se entiende. Lo que ocurre, a mi parecer, es que en el Derecho funciona mi parte lógico - racional del Cerebro, en suma, mi yo matemático. Combinación de tendencia interpretativa y artículos de un sinstema de miles de artículos y párrafos entreverados a lo que algunos llamamos 'Ordenamiento Jurídico' .

Un ejemplo:

Art. 10 + art. 1466 + art. 1682 Código Civil = nulidad absoluta del acto o contrato = art. 1687 ^ 1689.

El que sabe, sabe.... es pura gramática y lógica: matemática. ¿ven a lo que me refiero?

Ello sirve para ayudar al cliente, y abogar por su derecho, y salvarlo de su situación apremiante, las más de las veces... pero ¿Sirve para reflexionar acerca de los caminos del hombre? ¿Sirve acaso para comtemplar los colores de una flor, o intentar describir la belleza de la mujer amada, o de un atardecer frente al mar y al arrebol?

O sea, tan mal no estoy, pero echo de menos ciertos ejercicios en mi vida que han brindado lo que muchos conocen hoy como la capacidad descriptiva, o la facilidad de palabra de quién les escribe. En resumen: 'el tollo de Gama'. Y no es tollo, sino que es la capacidad de salir de la llaneza de las cosas, y de hacer ver que a veces en la búsqueda está el reto.

En todo caso, tan mal no estoy... claro ejemplo han sido estas palabras de explicación, mas debo reconocer que al barman le ha bajado harto la botella de licor.... y como buen barman, hay que reponer el licor

Es por esto que , en adelante, voy a reponer: Publicaré cada 10 - 14 días un planteamiento literario, distinto del clásico formato de ensayo o de trabajo argumentativo, privilegiando el bagaje y los reclamos del alma y del inconsciente...


Espero que les agrade la próxima entrada.

A chambrear el licor, a ambientarse, a brindar con este licor, el buen licor, el de la Palabra.



sábado, abril 22, 2006

SOBRE LIBERTAD Y REALIDADES...

“…En Chile no hay esclavos, y el que pise su territorio queda libre. Hombres y mujeres son iguales ante la ley.”Constitución Política de la República de Chile de 1980.
Artículo 19, nº 2 inciso 2º. Vigente hoy.

El mundo se hace cada vez más un pañuelo, y mientras ello ocurre el hombre no deja de sorprendernos con sus acciones y pensamientos. Pensamientos como la revolución, y de ahí al conservadurismo, y luego al neo – liberalismo, y vamos cambiando: por otro lado, vamos del estado religioso – en terminología comptiana positivista – al estado filosófico, y de ahí al positivo o científico. En estas evoluciones constantes del pensamiento humano, llegamos a un punto en que, dentro de un conjunto de discusiones acerca de tal o cual modelo, ya existen puntos comunes que ya se dan por superados o ya discutidos. Por ejemplo, el sistema económico occidental, o el fenómeno de la globalización, o ideas como la democracia, los derechos humanos y la superación al concepto de lucha de clases (incluso podemos recordar a Fukuyama y su “fin de la Historia”…). Y junto a todos ellos se encuentra también asentado uno de los importantes como principio y condición de existencia de la humanidad entera: la Libertad.

Nos decimos libres. Se nos enseña que vivimos para hacer lo que se nos ocurra dentro de ciertos márgenes, pero que a la larga somos nosotros quienes decidimos; somos los amos y señores del principio de causalidad, siendo capaces de decidirlo todo: qué queremos, dónde vamos, y cómo lo queremos.

Y estamos Orgullosos de ello. ¿Seguiremos orgullosos después de mirar un poco hacia el lado y comparar historias, pueblos, realidades, consecuencias?

En este blog quiero mostrar una postura diferente en cuanto al análisis y conclusión de lo que significa nuestra propia libertad, y en cuál es el real alcance que tiene hoy.

La libertad es aquella facultad que aumenta la utilidad de todas las demás facultades. (Immanuel Kant). Pues bien, los invito a hacer el siguiente experimento: imagínense a un sujeto de 20 años, hombre, nacido en una población de sectores bajos (qué sutil lo he dicho) como la pintana, la legua o la emergencia, de escolaridad incompleta, hijo de padres no profesionales ni con oficios decentes, probablemente cesantes; cuyo núcleo familiar se ha roto hace ya tiempo atrás, creciendo en ese ambiente rodeado de sus amistades hasta las 12:00 de la noche – claro, cómo se va a enfurecer el padre al sentirse molesto con la presencia del hijo por sentirse observado al comer - ; probablemente echado de la casa a obtener su propio sustento para “no molestar más de lo que molesta la propia vida”… imagínense que este hombre ingresa a trabajar como obrero de la construcción, o como recolector de basura, o como auxiliar… y se asienta finalmente en ese empleo, yendo desde su casa al trabajo bien temprano en la mañana, y volviendo bien tarde en la noche… tiene lo básico y se siente normal porque se ve libre como le dicen, igual que otros tantos, salvo por algo en su cabeza, una especie de pequeña molestia de idea, que no logra identificar…

Ahora imagínense a otro sujeto, de mejores condiciones que el anterior que le permiten llegar a esa abstracción tan concretamente recordada en las elecciones llamada clase media. Un oficinista, o un taxista o similar… pónganle dos hijos estudiando, una mujer medianamente exigente en bienes materiales y voila!... tendremos a un sujeto con no mucha opción…

Y por último: recuerden a cualquier sujeto que tiene una tarjeta de crédito. El panorama no es difícil de imaginar: prácticamente el 70% del país vive con ellas. Y de ese 70%, el 80% literalmente vive por ese sistema.

"Cuando hay dinero de por medio es muy difícil la libertad". (Gonzalo Torrente Ballester). ¿Podemos decir que estos sujetos, todas estas personas que hemos descrito – y que sabemos que debes ser hartas – son libres? ¿Son realmente libres? ¿Tienen opciones verdaderas y válidas de escape?

Veamos el caso del obrero: ¿tiene salida ese sujeto que sabe que algo le falta, mientras el cansancio de cada día de monotonía, de sudor, de ansia de surgir que se queda en ansia, lo carcome hasta enajenarlo? ¿Tiene una alternativa distinta a la que ya vive? ¿Cuál? ¿Será lícita ésta última?

Por otra parte ¿Tiene posibilidad de dirigir su curso causal el hombre de clase media cuyas necesidades van aumentando a medida que sus hijos crecen, a medida que su sueldo disminuye, a medida que su mujer está menos contenta, mientras mira sus cuentas y maldice por saber matemáticas?… y darse cuenta de que no le queda más opción que endeudarse de por vida, o sucumbir ante los números y exigencias…

Por último: ¿Qué posibilidad tiene los miles de tarjetodependientes, consumidores del plástico virtual, no por adicción, sino por ser su única vía de sobrevivencia, de vinculación al mundo? ¿Puede en sus circunstancias escoger?

Ahora viene lo bueno, basado en todo lo anteriormente expuesto.
¿Son realmente libres? ¿Tienen opciones verdaderas y válidas para decidir y manejar su causalidad?

"Estoy absolutamente convencido de que ningún hombre pierde su libertad sino por su propia debilidad" (Gandhi). Resulta que hoy quiero remecerlos. Sacudirlos. Estremecerlos si es posible, o zamarrearlos un poco. Quiero que, de pensarlo, traspiren helado y sientan la gota de sudor corriendo por su espalda. Ello por la inevitable conclusión a la que se llega: La cita del comienzo, cual es en Chile no hay esclavos y quien pise su territorio queda libre no es tal. Los esclavos están con nosotros. Comparten con nosotros y convivimos con ellos. Caminan allá afuera, forman parte del mundo profano todos los días, buscando una fisura en el cascarón, o la fuerza y la manera – sea por superación personal, sea por azar – de doblarle la mano a ese aleatorio conjunto de miles de causas entreveradas a la que algunas llaman destino…

Sin embargo, he aquí mi conclusión: la única forma inteligente que ha tenido la humanidad a lo largo de su existencia de lidiar con todo lo imprevisible o inevitable de los efectos de tantos que se rodean es, necesariamente, crearse el estado mental de autonomía, un estado de racionalidad frente a la situación que nos toque vivir. Luego no es esclavo quien permanece inactivo, si logra el dominio de su estado propio de mentalidad, y se olvida o descomplica de la causalidad que, por no ser propia, no le corresponde. Al principio cuesta, pues la libertad significa responsabilidad. Mas, en decir de Albert Camus la libertad no es más que la oportunidad de ser mejor.

La verdadera libertad consiste en el dominio absoluto de sí mismo. (Michel de la Montaigne) Y para alcanzarla sólo hay un camino: el desprecio de las causas que no dependen de nosotros.

Debo decir que es una volada algo particular: no tienen por qué compartirla. Sólo quiero que echen a andar la máquina un poco por este tema, y tengan su propia opinión... Sus comentarios, al post...

viernes, abril 14, 2006

Este espacio no pretende ser una demostración de "autenticidad", ni de inteligencia, ni de cabronería o soberbia, tampoco se refiere a un "portal de la verdad como mal pudiere pensarse o colegirse del nombre... no. Si creen que es mi 'diario de vida para el mundo', debo decir que tampoco. Este espacio lo he creado con el sólo propósito de ser un lugar para desarrollar diversas ideas y puntos de vista de muchas cosas... en eso sí conocerán parte importante de mí - no mucho, no todo -, y puede que no compartan ni coincidan con mucha de la lógica - o 'ilógica' - que se esparcirá en este formato... ...sólo busco embriagarme, embriagarlos con el licor de la palabra. Al principio se siente fuerte pasando por la garganta, como la peor grapa de campo, o el aguardiente bebido al seco, sin pensarlo. Y además deja ese gustillo de sabor metálico - amargoso en el paladar, cual vino químico de caja, cartonet olvidado, al final del estante del almacén de turno. Hasta que tu imaginación fluye, se encuantran y conectan las letras en la cabeza, los colores, las formas... y se lanzan al vacío, a la confrontación, comparación y compartir con otras ideas. ¿Por qué me gustan tanto las ideas? R: Porque no temen lanzarse a la piscina, y probar... Busco formar un espacio que origine o reflexión, o debate, o un simple 'hmmm...'. Y actitud adulta y tolerante de parte de quienes lean estas palabras, palabras sueltas y amarradas con ganas, palabras que no esperan nada de tí, palabras que entienden que son sólo una de las distintas versiones e interpretaciones de la apreciación de un solo sujeto, quien les escribe. Como ven, al principio no será miel sobre hojuelas.... pero de a poco, si quieres, le vas tomando el gusto.